Entre las estrellas,
entre las flores
entre las olas del mar
o entre las piedras del río.
Buscar la belleza
ese debe ser el fin de la vida.
No nos demos por vencidos
aunque estemos hartos y cansados.
Sólo tenemos que decidirnos
a seguir serenamente el camino
tantas veces esquivado
Volvamos la vista
a nuestro interior
y barramos de allí el odio,
la rabia, la burla hacía los demás,
para encontrar la ternura y la emoción,
para encontrar la belleza,
para encontrar a Dios.
Demonos una oportunidad.