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| Camprodón, foto de Gloria Reyna |
Siento que no puedo ni debo
retirarme, sin acabar el combate
como el boxeador que pierde por puntos.
Ver como la lucha ha sido inútil.
Así que en este día
que aún no he perdido,
te diré todo lo que todavía
no te he dicho.
Te miraré a los ojos.Confiaré.
Me dejaré llevar por ese mañana
que me prometiste.
La ilusión me abrazará tan fuerte,
tanto, tanto...
que casi no podré respirar.
La esperanza se estremecerá
y los copos de nieve me susurrarán:
-"Habla, es tu momento".
Oscurece y la niebla cubre mi voz.
No puedo.
¿Cómo expresar lo que siento?
Las palabras huyen.
Tan sólo quedan corazones blancos
en la escarcha del tiempo.
Este pequeño escrito está inspirado en la fotografía "Supprise" del blog "Fotokarusellen", al que desde aquí doy las gracias.
ResponderEliminarprecioso amiga...
ResponderEliminarNo hacen falta palabras
ResponderEliminarcuando es el corazón
el que habla.
También cicatriza
el tiempo.
Un beso
No hay que dejar que anochezca sin decir lo que se siente. Bueno, quizás la noche tampoco está mal para decir. Pruébalo.
ResponderEliminarA veces por más que tu corazón te impulsa a hablar ...los labios callan y el momento pasa .
ResponderEliminarY aquel instante se va ...y no parece volver, siempre nos decimos que hablaremos antes que sea tarde y ocasional ...siempre parece ser tarde o temprano , pero no el momento idóneo.
Gracias querida amiga , leerte es un placer .
Malusa
A beautiful post, my friend.
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