Castelldefels, Foto de Gloria Reyna |
Se ha marchado enfadado.
Le cambié su azul por el mio y desapareció
No he podido resistirme a las lágrimas y como
no me gusta que me vean en este lamentable estado
me he ido a llorarle a un desconocido.
Me he lanzado a sus olas con desespero
dispuesta a acabar con todo
pero asombrado de mi extremismo
me ha cogido como si fuera un plástico cualquiera
y de un golpe de mar me ha
dejado de nuevo en la orilla.
He regresado cabizbaja y arrastrando
los pies por la arena
para darle mayor dramatismo,
Mejor no cambio nada,
puede que así su azul, mi azul, regrese.
Me gusta el azul. Sólo, sin adjetivos. Creo que se podrán mezclar sin problemas y sin que generen otro color que el azul.
ResponderEliminarGloria, espero que tu azul regrese pronto. Y si no lo hace, es que ese azul no merecía la pena. Pero, no debes preocuparte, el azul, nos rodea por todos lados. Gracias por tus visita. Un abrazo.
ResponderEliminarPD: Estar inquieto en la infusión, es el camino adecuado, para no ser arrastrado por la marea.
Gloria, llegué hasta aquí por un contacto en común, me dio curiosidad y vine.
ResponderEliminarTienes un buen blog y la entrada me ha gustado, así que voy a ser tu seguidor n° 15.
Si tienes ganas puedes pasarte por el mío, está invitada, sólo tienes que picar sobre mi nombre.
Un beso y éxitos...
Humberto.
el azul se torna.... celeste... turquesa ....oscuro.... gélido... pero nunca muere...
ResponderEliminarte deseo un domingo lleno de serenidad...
abrazos desde el azul...