Callejuela, Barcelona. Foto de Gloria Reyna |
En el corazón llevo las heridas
que te recuerdan ya para siempre.
Imposible borrar lo dicho o hecho.
¿fueron los colores de mis alas
los que enturbiaron tu razón?.
Quiero vestirme de nuevo
con el rojo vida, con el verde esperanza
con todo los colores
excepto con la negrura de tus insultos
o la de tu indiferencia
-no sé que es peor-
Demasiado bien me conoces,
así que sobran las palabras
en este velatorio de viejas caricias,
en este campo de batalla
donde sólo quedan victimas.
No sé si he ganado o he perdido
Eso ahora, no importa.
Atrás quedan el frío de tu mirada
y los colmillos de tus palabras.
Otro camino me espera.
Nota: Inspirado en la situación que atraviesa mi querida M.C.
A seguir siempre adelante.
ResponderEliminarPd: Te invito a que visites mi blog de cine, ahí también publico cuentos mios.
M.C. y M.G. ponen funda a los colmillos de las palabras con este poema.
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